Miedo a no ser suficiente.

Miedo a que los demás se rían de mí.

Que invaden mis sentimientos, mis emociones.

Es un miedo que me ha acompañado siempre, desde pequeña. La sensación de ser diferente, de no encajar. Seguido de una necesidad de encajar en la sociedad. De querer sentirme como los demás. Todo eso me ha hecho encerrarme más y más en mí.

Tengo el recuerdo de pequeña de intentar ser yo y notar que la gente me miraba raro. Sentía que se reían, hablaban de mí a mis espaldas…y empecé a no mostrar lo que sentía e intentar hacer y comportarme simplemente como se esperaba de una niña de mi edad.

Hasta hoy en día, en el que no sé expresarme. Tengo un bloqueo cada vez que intento decir lo que siento. Me entra miedo. Pánico.

A quedarme sola.

A que se rían de mí.

A no “ser suficiente”.

Y vuelvo a actuar como cuando era niña.

Y así, por unos instantes, desaparece el miedo.

Otro miedo más que se acumula dentro de un baúl que no tardará en explotar, en mi caso, en forma de TCA.

…

Decido enfrentarme a mis miedos, decido luchar, decido dejar de temer. Ya no me da miedo lo que piense la gente. He comprendido que lo importante soy yo. Que me tengo que cuidar. Me tengo que escuchar.

Miro atrás, a esas frases escritas hace años que me llevaron a un sitio tan oscuro y me alegro de haber luchado por superarlo. Por haber comprendido que yo no soy lo que los demás piensen de mi. Que no tengo que vivir por los demás, sino que tengo que vivir por y para mí.

Ya no me da miedo quedarme sola, porque he aprendido a estar conmigo misma, y he descubierto que tengo gente a mí alrededor que no me abandonará. Gente que importa de verdad. Gente que me quiere.

He ganado confianza en mí misma, tanta como para saber que nadie se va a reír de mí, o que si lo hace, no me va a afectar. Porque me quiero tal y como soy, se que soy válida, que me acepto, me quiero. Y me gusta lo que veo.

Ahora grito a los cuatro vientos lo que siento. No temo expresarme, al revés, temo a callarme. Porque ya no quiero permanecer más tiempo callada. Ya no quiero volver a no quererme.

A partir de ahora, voy a vivir y a ser libre.

Leire Martín

@quiseseranaymia