Quiero hablarte como si te escribiera una carta. La carta de una tía orgullosa de su sobrina.

Querida,

Si tengo que definirte te diré que eres un ejemplo de superación y un ser humano admirable.

Me llena de alegría ver la ilusión que tienes en nuevos proyectos y el entusiasmo que pones en todo lo que haces. Y también tu amor y dedicación a los demás, en todos los ámbitos.

Te has ido liberando del TCA. El objetivo es dejarlo atrás, con los días grises y noches sin luna que te hizo sufrir.

Y mirar hacia adelante con paso seguro, guiada por la luz que dan la madurez y la confianza. El apoyo y la estimación.

Gracias por el regalo de tus risas llenas de alegría. Por la generosidad y la nobleza que desprendes, cualidades inherente a ti.

Gracias por tu capacidad de compromiso y por tu persistencia en querer salir de donde te encontraste prisionera.

Gracias por dejarte ayudar.

Un fuerte abrazo,

Tu tía.

Teresa Vilademunt.